Pasta con salsa cremosa y salchicha

Oh! Nuestra querida pasta. Y es que, a parte de la pizza que ya os he mostrado en el blog, si hay algo que nos ha dado la bella Italia al resto del mundo es la pasta. Y es que la pasta la tenemos en multitud de variantes y formas, y lo que es más importante, admite millones de combinaciones de ingredientes, sabores y salsas. Y es precisamente por eso que yo digo que la pasta puede servir perfectamente de receta de "reciclaje".

¿Qué es una receta de reciclaje? Como este término lo usaré bastantes veces en el blog, os voy a explicar a qué me refiero cuando digo que una receta es de reciclaje. Y es que antes de hacer la compra, son muchas las ocasiones en las que abres el frigorífico y observas que te queda un poco de esto aquí y otro poquito de lo otro allí. ¿Y qué haces con ello? Pues mucha gente dirá: ¡Bah! Si para tres salchichas y medio bote de tomate... Lo tiro a la basura." Bueno, en mi caso eso nunca ocurre. Y nunca ocurrirá, porque me encanta recopilar los ingredientes que tengo que usar y salir con una receta nueva que nunca antes había hecho. Pues esto es lo que es una receta de reciclaje, platos que se hacen con ingredientes que tenemos de sobra en el frigorífico y tenemos que gastar antes de comprar más.

Pues de esta manera llegué a preparar esta deliciosa-para-chuparse-los-dedos receta. Un brick de nata, medio bote de tomate triturado y tres o cuatro salchichas y ahí tenía un plato de pasta que me encantó a mí y a los míos y que, desde entonces, me han pedido en más de una ocasión. Ahí va la receta! :)

PASTA CON SALSA CREMOSA Y SALCHICHA

INGREDIENTES (3-4 personas)

- 400 gr. de pasta (en esta caso usé tallarines)

- 5-6 salchichas frescas de cerdo (con la piel quitada).

- 1/2 cebolla picada.

- 2 dientes de ajo picados muy finamente

- 1/2 vaso de vino blanco.

- 1 vaso de tomate natural triturado o troceado.

- 200 mi (1 brick pequeño) de nata para cocinar.

- Un pellizco de orégano (o al gusto)

- Sal, pimienta y aceite de oliva virgen.

- Queso para rallar (yo usé queso curado de oveja)

ELABORACIÓN

1.- Primero debéis cortar y medir todos los ingredientes de antemano y llenar una cacerola con agua y un buen puñado de sal y llevarla a ebullición para la pasta. En una sartén mediana con una cucharada de aceite de oliva añadir las salchichas sin la piel y, con la cuchara de madera, romper la salchicha hasta que queden trozos pequeños. Dejar cocinar durante un par de minutos a fuego medio alto hasta que la salchicha esté hecha y doradita. Escurrir con una cuchara y apartar a un plato limpio para seguir con la elaboración.

2.- A continuación, en la misma sartén con un chorrito más de aceite, añadir la cebolla picada pequeñita. Dejar cocinar a fuego medio-bajo durante 4-5 minutos con un pellizco de sal o hasta que esté transparente y pochada. Añadir entonces el ajo picado muy finamente y dejar cocinar durante un par de minutos junto con la cebolla. Posteriormente, debéis añadir el medio vasito de vino blanco y dejarlo a fuego alto durante un minuto o hasta que el alcohol se haya evaporado (si no tendríamos una salsa con un sabor mega potente a alcohol, y eso, en este caso, no es lo que buscamos, jeje). Añadir el vaso de tomate triturado y dejar cocinar durante 10 minutos con otro pellizco de sal. Es en este punto cuando tenéis que añadir vuestra pasta al agua hirviendo y cocerla hasta que esté al dente (que es como a mí me gusta).

¡Truquito!: si vuestro tomate está demasiado ácido, cuando lo estéis cocinando, debéis añadir media cucharadita de azúcar para rebajar la acidez. 

3.- Cuando el tomate esté bien hecho, debéis añadir los trozos de salchicha ya cocinados, el orégano y la pimienta y, a continuación, los 200 ml. de nata para cocinar. Dejar cocinar durante un 3-4 de minutos a fuego medio. En este punto debéis probarlo y rectificar de sal si es necesario.

4.- Una vez escurrida la pasta, ponerla otra vez en la olla donde la habéis cocido y añadir la salsa por encima. Remover y mezclar la salsa con la pasta. Servir y rallar queso por encima. Yo elegí un buen queso curado manchego, pero un parmesano o grana padano vendría de perlas para esta receta.

Y ya está, tan sencillo como esto. Aquí tenéis esta receta de reciclaje que encantará a todo el mundo. Ni que decir cabe que, aunque yo he usado tallarín, podéis usar el tipo de pasta que prefiráis o que tengáis por casa. La textura de la salsa es cremosa y súper sabrosa. Probad a hacerla y me contáis el resultado. Me apuesto un pie a que la repetís. Y estoy seguro que no lo perdería. Ahí lo dejo... :)



Espero que os haya gustado y ya sabéis que podéis seguirme en mi cuenta de twitter donde iré proponiendo nuevas recetas y donde podéis hacer cualquier tipo de sugerencia sobre las que os gustaría que publicase en el blog. Un abrazo a todos y ... BON APPÉTIT!! :D